Las negociaciones entre la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER) y los productores de maíz se rompieron este lunes, luego de que las organizaciones campesinas calificaran como “una grosería” la propuesta gubernamental de pagar 5 200 pesos por tonelada de maíz, cifra muy por debajo de lo que consideran necesario para cubrir los costos de producción.

Tras más de tres horas de reunión, los representantes agrícolas abandonaron la mesa instalada en la Ciudad de México, argumentando que la oferta no responde a la crisis que atraviesa el sector desde hace varios años. “Venimos a buscar soluciones, no a limosnear”, expresó uno de los voceros del movimiento, quien advirtió que las movilizaciones continuarán en distintos puntos del país.

El descontento de los productores se ha extendido a lo largo del territorio nacional. Este lunes, miles de agricultores bloquearon carreteras y realizaron manifestaciones en al menos 20 estados, desde Sinaloa y Sonora hasta Guanajuato, Jalisco, Puebla y Veracruz, según reportes de El País. Las protestas, que iniciaron a mediados de octubre, exigen un precio justo que compense el alza de los insumos como fertilizantes, diésel y transporte.

Los productores acusan que el precio del maíz mexicano sigue atado a la Bolsa de Chicago, lo que los deja a merced de la especulación internacional y de la concentración del mercado en pocas manos. “Cuatro o cinco grandes compradores determinan el precio del grano, y nosotros terminamos pagando los costos”, denunciaron.

La SADER, por su parte, defiende que el monto propuesto responde a un contexto internacional adverso, marcado por una sobreoferta global de maíz y la caída de precios en los mercados de futuros. El Gobierno asegura que prepara un paquete integral de apoyo que incluirá créditos, incentivos a la producción y esquemas de comercialización más equitativos.

Sin embargo, los representantes campesinos sostienen que el problema es estructural. Desde hace más de tres años, los precios internos del grano no han repuntado, mientras los costos de producción se disparan. “No podemos seguir sembrando a pérdida”, advirtieron.

De acuerdo con La Jornada, la ruptura de la negociación ocurre apenas diez días después de que la SADER instalara una “mesa permanente” con productores del Bajío y Occidente para revisar los precios base y los mecanismos de comercialización. El objetivo era evitar bloqueos como los registrados recientemente en Guanajuato y otras entidades.

El conflicto amenaza con escalar si no se llega a un acuerdo en las próximas semanas. Los productores no descartan nuevas movilizaciones, incluso frente a Palacio Nacional, mientras el Gobierno busca involucrar a la industria molinera y a los grandes compradores para definir un esquema más equilibrado.

Expertos advierten que la falta de consenso podría afectar la cadena alimentaria nacional, pues el maíz es el principal insumo para la producción de tortilla, alimento básico en el país. Si los costos no se estabilizan, se estima que los precios al consumidor podrían verse presionados en los próximos meses.

Fuentes de la propia Secretaría adelantaron que se trabaja en una propuesta revisada, que podría presentarse en noviembre y contemplaría medidas para desvincular gradualmente el precio del maíz nacional de los indicadores internacionales, al tiempo que se fortalecen los mecanismos de compra directa a productores locales.

Mientras tanto, el campo mexicano mantiene su reclamo: un precio justo y políticas que realmente protejan la producción nacional. Lo que empezó como una mesa de diálogo amenaza con convertirse en un nuevo frente social, en medio de un panorama económico incierto y una tensión creciente entre el Gobierno y el sector agroalimentario.

Boletín Informativo

Mantente al día y únete a la comunidad

Datos de Contacto

Paseo de los Insurgentes Tercer Piso
Colonia Granada
C.P. 37160. León.
Guanajuato, México.

Teléfonos:
(+52) 477 675 52 43

E-mails:
hola@viveguanajuatonoticias.com

Ir al formulario

© 2025. Derechos reservados Vive Guanajuato.

Privacy Preference Center